miércoles, 14 de octubre de 2015

Carta de una madre a sus hijos - Isabel allende


Siempre que quieren hablar de madres en la televisión muestran mujeres con chicos en los brazos, sonrientes, dulces, cariñosas, sin una pizca de cansancio, espléndidamente maquilladas y a eso agregan maravillosas frases de pósters.¡¡¡Mentiras!!!... Las mamás no somos abnegadas amantes del sacrifico y aguerridas guerreras que todo lo pueden. Las mamás lloramos abrazadas a la almohada cuando nadie nos ve, pedimos la peridural en el parto. Insultamos en 17 idiomas cuando tenemos que poner el despertador a las 2 de la mañana para ir a buscarlos a una fiesta. Cuando les decimos que no se peleen con ese compañerito que les dice 'enano' o 'cuatro ojos', y les damos toda clase de explicaciones conciliatorias, en realidad querríamos tener el cogote del pequeño verdugo entre nuestras manos. Y también pensamos que la vieja de geografía es un mal bicho cuando les baja la nota porque no saben cuántos metros mide el Aconcagua que, al final, a quién cuernos le importa. Pero no lo podemos decir.... No es que nos encante pasarnos horas en la cocina tratando de que el pescado no tenga gusto a pescado y disimulando las verduras en toda clase de brebajes, en lugar de tirar un Patty a la plancha. Es que tenemos miedo de que no crezcan como se debe.... No es que nos preocupe realmente que se pongan o no un saquito... Es que tenemos miedo de que se enfermen.... No es que los queramos más cuando se bañan. Es que no queremos que nadie les diga roñosos.... No lo hacemos por ustedes. Lo hacemos por nosotras.... Porque ser mamá no tiene que ver con embarazos, pañales y sonrisas de aspirinetas.... Tiene que ver con querer a alguien más que a una misma. Con ser capaz de cualquier cosa con tal de que ustedes no sufran. NADA, nunca, jamás.... Ustedes nos hacen felices... cuando les encantan nuestras milanesas, cuando nos consideran sabias por contestar todas las preguntas de los concursos de la tele. Cuando vienen llorando a gritos porque se rasparon la rodilla y nos dan la posibilidad de darles consuelo y curitas.... Cuando recién levantadas nos dicen, qué linda que estás, mamá. Ustedes nos hacen mejores. ... Nos dan ganas y fuerzas. Nos comeríamos un gurka crudo antes de que les toque un dedito del pie. Nos lavamos la cara y salimos del baño con una sonrisa de oreja a oreja para hacerles saber que la vida es buena, aunque nos vaya como el reverendo. Cantamos las canciones de Chiquititas y vemos Barney y escuchamos a Los piojos y compramos Nopucid y repasamos 500 veces la tabla del 2 y arreglamos el carburador para llevar a los pibes a fútbol, a inglés, a dibujo, a la psicóloga, a básquet, a volley, a danzas, a la casa de la amiga, a la maestra particular, al dentista, al médico, a comprar un pantalón. Y armamos 24 bolsitas con anillitos y pulseritas y tratamos de que la torta parezca un Pikachu... Nos buscamos otro trabajo y sacamos créditos y nos compramos libros y vamos al psiquiatra y al pediatra y a los videos y negociamos con los maestros y los acreedores y recortamos figuritas... y estudiamos junto a ustedes ríos, provincias, las capitales de los países de Europa y nos ponemos lindas y nos enojamos y nos reímos y nos salimos de quicio y nos convertimos en la bruja y la princesa de todos los cuentos....... Sólo y exclusivamente para verlos felices.... Velos felices es lo que nos hace felices. Ojala pudiéramos pegar el mundo con cinta scotch (como el velador que cayó en combate en la última guerra de pijamas party), para que fuera un lugar mejor para ustedes.... Gracias por hacerme su Mamá, Gracias por ahcerme tan importante.... Gracias, por esas porquerías que hacen en el colegio con corchitos y escarbadientes (que casi nunca entiendo para que sirven pero guardo religiosamente),... Gracias por los abrazos, los besos, las lágrimas, los dolores, los dientes de leche, las cartitas, los dibujos en la heladera. Por tantas noches sin dormir, los boletines, las plantas rotas del jardín por jugar a la pelota. Por mi maquillaje arruinado por ser usado para jugar a la mamá, por las fotos de la primaria........ Son mis mejores medallas. ¡Gracias porque LOS AMO!!!. Y ese, es el amor que me hace grande. Lo demás es Marketing.

Isabel Allende

lunes, 12 de octubre de 2015

VIDEO: EL BAILE DEL SEMÁFORO - BOGOTÁ - COLOMBIA


Un mino callejero en el semáforo, muy creativo, 
con buena música,  asombra y despierta una sonrisa,
esqueletos bailarines y con mucho ritmo!, 
es en Bogotá, Colombia

domingo, 4 de octubre de 2015

El corazòn tiene cerebro - Entrevista de Ima Sanchís periodista de: La Vanguardia - La Contra a: Annie Marquier, investigadora de la conciencia



Que el corazón tiene cerebro es una metáfora, ¿no?
No. Se ha descubierto que el corazón contiene un sistema nervioso independiente y bien desarrollado con más de 40.000 neuronas y una compleja y tupida red de neurotransmisores, proteínas y células de apoyo.


¿Es inteligente?
Gracias a esos circuitos tan elaborados, parece que el corazón puede tomar decisiones y pasar a la acción independientemente del cerebro; y que puede aprender, recordar e incluso percibir. Existen cuatro tipos de conexiones que parten del corazón y van hacia el cerebro de la cabeza.

Primera...
La comunicación neurológica mediante la transmisión de impulsos nerviosos. El corazón envía más información al cerebro de la que recibe, es el único órgano del cuerpo con esa propiedad, y puede inhibir o activar determinadas partes del cerebro según las circunstancias.

¿Significa eso que el corazón puede influir en nuestra manera de pensar?Puede influir en nuestra percepción de la realidad y por tanto en nuestras reacciones.

Segunda conexión...
La información bioquímica mediante hormonas y neurotransmisores. Es el corazón el que produce la hormona ANF, la que asegura el equilibrio general del cuerpo: la homeostasis. Uno de sus efectos es inhibir la producción de la hormona del estrés y producir y liberar oxitocina, la que se conoce como hormona del amor.

Tercera...
La comunicación biofísica mediante ondas de presión. Parece ser que a través del ritmo cardiaco y sus variaciones el corazón envía mensajes al cerebro y al resto del cuerpo.

Cuarta...
La comunicación energética: el campo electromagnético del corazón es el más potente de todos los órganos del cuerpo, 5.000 veces más intenso que el del cerebro. Y se ha observado que cambia en función del estado emocional. Cuando tenemos miedo, frustración o estrés se vuelve caótico.

¿Y se ordena con las emociones positivas?
Sí. Y sabemos que el campo magnético del corazón se extiende alrededor del cuerpo entre dos y cuatro metros, es decir, que todos los que nos rodean reciben la información energética contenida en nuestro corazón.

¿A qué conclusiones nos llevan estos descubrimientos?
El circuito del cerebro del corazón es el primero en tratar la información que después pasa por el cerebro de la cabeza. ¿No será este nuevo circuito un paso más en la evolución humana?

¿...?
Hay dos clases de variación de la frecuencia cardiaca: una es armoniosa, de ondas amplias y regulares, y toma esa forma cuando la persona tiene emociones y pensamientos positivos, elevados y generosos. La otra es desordenada, con ondas incoherentes.

¿Aparece con las emociones negativas?
Sí, con el miedo, la ira o la desconfianza. Pero hay más: las ondas cerebrales se sincronizan con estas variaciones del ritmo cardiaco; es decir, que el corazón arrastra a la cabeza. La conclusión es que el amor del corazón no es una emoción, es un estado de conciencia inteligente.

...
Ya ve, el cerebro del corazón activa en el cerebro de la cabeza centros superiores de percepción completamente nuevos que interpretan la realidad sin apoyarse en experiencias pasadas. Este nuevo circuito no pasa por las viejas memorias, su conocimiento es inmediato, instantáneo, y por ello, tiene una percepción exacta de la realidad.

Parece ciencia ficción.
Está demostrado que cuando el ser humano utiliza el cerebro del corazón crea un estado de coherencia biológico, todo se armoniza y funciona correctamente, es una inteligencia superior que se activa a través de las emociones positivas.

Pues parece que nadie lo utilice...
Es un potencial no activado, pero empieza a estar accesible para un gran número de personas.

¿Y cómo puedo activar ese circuito?
Cultivando las cualidades del corazón: la apertura hacia el prójimo, el escuchar, la paciencia, la cooperación, la aceptación de las diferencias, el coraje...

Es la práctica de pensamientos y emociones positivas. En esencia, liberarse del espíritu de separación y de los tres mecanismos primarios: el miedo, el deseo y el ansia de dominio, mecanismos que están anclados profundamente en el ser humano porque nos han servido para sobrevivir millones de años.

¿Y cómo nos libramos de ellos?
Tomando la posición de testigos, observando nuestros pensamientos y emociones sin juzgarlos, y escogiendo las emociones que nos pueden hacer sentir bien. Debemos aprender a confiar en la intuición y reconocer que el verdadero origen de nuestras reacciones emocionales no está en lo que ocurre en el exterior, sino en nuestro interior.
Cultive el silencio, contacte con la naturaleza, viva perìodos de soledad, medite, contemple, cuide su entorno vibratorio, trabaje en grupo, viva con sencillez. Pregunte a su corazòn cuando no sepa que hacer.
Annie Marquier
"El corazón tiene cerebro"
      
             Matemàtica e Investigadora de la Conciencia (Canadà)

            Entrevista de: Ima Sanchís  http://www.lavanguardia.com/lacontra/